si tuviera que cavar mi propia tumba,
lo haría con una cuchara.
quisiera sentir hasta el ultimo minuto
de aliento que me quedase.
cada gramo de tierra removido
un palpitar menos,
ver éste baldío
como el último pedazo de tierra
que mis ojos verán;
el aire caliente y polvoso
que entra por mis fosas nasales
lo último de oxígeno
que le he de robar a éste mundo.
mi familia, mis amigos...mi vida
cada sonido del roce, la cuchara cavando
más profundo.
como recuerdo su risa
sarcástica, sardónica...complice
las gotas de sudor, las cuento como minutos
la tierra se las traga y consume
como lo harán los gusanos
cuando el sol se oculte
y solamente tierra transite
por mi garganta.
al aspirar hondo, el humo satura tanto
como tabaco recién apagado
me voy metiendo más en la tierra
como en aquellas noches etilicas
al fondo de una botella.
empecé de rodillas, me encuentro sentado
la cuchara hace metros que dejó de ser utilizable
he empezado a cavar con mis manos
sólo me quedan cuatro uñas
y dos del otro lado.
y las lagrimas, ni contarlas
no le lloro al arma pegada a mi nuca
ni a la voz de palabras soeces
que me grita a la espalda
le lloro a la vida que se empezó a acabar
ésta tan rutinaria mañana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario